Podría explicarte que perdí 100 kg y tú, te asombrarías de cómo lo conseguí. En realidad, perdí mucho más que eso.
Perdí el miedo, perdí la inseguridad y la falta de confianza.
Porque ahora peso menos, pero tengo mucho más.
Quiero que entiendas que me gusta luchar contra lo imposible para hacerlo posible.
Te ha tocado vivir aquí, quizás, el destino ha llamado a tu puerta y ha hecho posible que estés leyendo esto. Quizás, ha llegado tu momento. El momento de empezar a vivir una vida plena y a aprovechar todas esas cosas que tienes en tu poder.
Tu cuerpo, tu respiración, tus órganos… somos iguales.
“Si yo pude, tú también puedes”
Aquí no encontrarás varita mágica. No vendo humo, no vendo pastillas milagrosas.
El único milagro que encontrarás aquí eres TÚ. Sí, tú.
Con tu constancia, tu esfuerzo y tu confianza, conseguirás cosas increíbles.